Cambios, crisis y productividad. El cambio climático, las crisis y la tecnología van irremediablemente unidas a la salud mental de las personas trabajadoras y empiezan a dar sus frutos en la conciencia empresarial, de manera que la implementación de sistemas de vida sostenibles impulsa al cuidado de las personas en los entornos de trabajo como casos de éxito empresarial. Se trata de hacer compatible el binomio sostenibilidad social y sostenibilidad empresarial.
La lucha por alcanzar niveles altos de productividad muchas veces se esconde tras el malestar psicológico y emocional de los empleados, fruto de la presión de la propia empresa y del mercado de trabajo. A esta presión tenemos que unir necesariamente, la actualización tecnológica a la que la digitalización económica nos somete, con consecuencias más gravosas en la salud mental de las personas trabajadoras. Para paliar estas dolencias contamos con buenas prácticas. Shakers, una startup fundada para crear una comunidad de freelancers con el fin de conectarlos a las empresas, propone una vía a la mejora de la salud mental en el trabajo a través de la autonomía, la autogestión y la independencia laboral, utilizando una herramienta que permite al trabajador decidir sus tiempos, sus expectativas y sus objetivos, y que está basada en la autonomía y conectividad que proporcionan las plataformas online. Esta cuestión no está exenta de riesgos como se evidencia en los contenidos derivados de la investigación de nuestro laboratorio, caso de la ficha científico-técnica sobre riesgos psicosociales en el trabajo de plataformas online (pdf), que los desarrolla.
¿Ser felices en el trabajo? A más abundamiento, la actualidad del mercado de trabajo, nos arroja otros datos. Son mayoría las personas que optan por priorizar salud, flexibilidad y bienestar a la hora de elegir un trabajo, lo que incide en la necesidad de evolución de las empresas hacia una competitividad que tenga su centro en las personas, que según los estudios citados, están dispuestas a dar más de sí mismas si se fomentan los entornos de bienestar. La dificultad se encuentra en alcanzar el equilibrio entre la introducción de la tecnología, el trabajo y la salud mental. Las nuevas generaciones tienen otro concepto del trabajo basado en trabajar para vivir y no vivir para trabajar, y quieren seleccionar su empleo, tanto que cualquiera no les vale y están incluso dispuestos a renunciar a él, pero no a su felicidad. El llamado “salario emocional”, referido a todas aquellas retribuciones no económicas que el trabajador recibe de la empresa con el objetivo de incentivarle de forma positiva, es buena prueba de ello y un medidor, en ocasiones, a tener en cuenta. Esta imagen refleja las percepciones de las generaciones actuales de personas trabajadoras en la búsqueda de trabajos que hagan felices:
- La salud mental de las personas trabajadoras se encuentra en el centro de las nuevas políticas de gestión empresarial
- Evitar los riesgos psicosociales puede influir en la mejora de la productividad de las empresas promoviendo la evolución hacia trabajadores más felices
Cambios, crisis y productividad. El cambio climático, las crisis y la tecnología van irremediablemente unidas a la salud mental de las personas trabajadoras y empiezan a dar sus frutos en la conciencia empresarial, de manera que la implementación de sistemas de vida sostenibles impulsa al cuidado de las personas en los entornos de trabajo como casos de éxito empresarial. Se trata de hacer compatible el binomio sostenibilidad social y sostenibilidad empresarial.
La lucha por alcanzar niveles altos de productividad muchas veces se esconde tras el malestar psicológico y emocional de los empleados, fruto de la presión de la propia empresa y del mercado de trabajo. A esta presión tenemos que unir necesariamente, la actualización tecnológica a la que la digitalización económica nos somete, con consecuencias más gravosas en la salud mental de las personas trabajadoras. Para paliar estas dolencias contamos con buenas prácticas. Shakers, una startup fundada para crear una comunidad de freelancers con el fin de conectarlos a las empresas, propone una vía a la mejora de la salud mental en el trabajo a través de la autonomía, la autogestión y la independencia laboral, utilizando una herramienta que permite al trabajador decidir sus tiempos, sus expectativas y sus objetivos, y que está basada en la autonomía y conectividad que proporcionan las plataformas online. Esta cuestión no está exenta de riesgos como se evidencia en los contenidos derivados de la investigación de nuestro laboratorio, caso de la ficha científico-técnica sobre riesgos psicosociales en el trabajo de plataformas online (pdf), que los desarrolla.
¿Ser felices en el trabajo? A más abundamiento, la actualidad del mercado de trabajo, nos arroja otros datos. Son mayoría las personas que optan por priorizar salud, flexibilidad y bienestar a la hora de elegir un trabajo, lo que incide en la necesidad de evolución de las empresas hacia una competitividad que tenga su centro en las personas, que según los estudios citados, están dispuestas a dar más de sí mismas si se fomentan los entornos de bienestar. La dificultad se encuentra en alcanzar el equilibrio entre la introducción de la tecnología, el trabajo y la salud mental. Las nuevas generaciones tienen otro concepto del trabajo basado en trabajar para vivir y no vivir para trabajar, y quieren seleccionar su empleo, tanto que cualquiera no les vale y están incluso dispuestos a renunciar a él, pero no a su felicidad. El llamado “salario emocional”, referido a todas aquellas retribuciones no económicas que el trabajador recibe de la empresa con el objetivo de incentivarle de forma positiva, es buena prueba de ello y un medidor, en ocasiones, a tener en cuenta. Esta imagen refleja las percepciones de las generaciones actuales de personas trabajadoras en la búsqueda de trabajos que hagan felices:
Buenas prácticas empresariales: la productividad a través de la salud mental. En relación con el concepto de salario emocional, y asumiendo que, en la actualidad, el hartazgo laboral, las desigualdades y la incertidumbre se presentan como cuestiones que los empleados tienen en cuenta a la hora de acceder o permanecer en un trabajo y que además tienen una influencia directa en la salud mental, la Great Place to Work, una compañía que identifica, ayuda a construir y otorga reconocimientos como Excelentes Lugares de Trabajo a organizaciones, a través de la opinión de las propias personas empleadas, ha elaborado un informe de evaluación de 364 compañías en España basado en la opinión de 430 672 empleados, considerados, en su política de gestión, la fuente de información más fiable, con el objetivo de señalar buenas prácticas empresariales como contribución al futuro de la sociedad. El informe ha dado lugar al ranking Best Workplaces 2022.
Este ranking supone el reconocimiento a la excelencia en el cuidado de personas y en la promoción de los resultados de las mejores empresas para trabajar. La característica diferencial de estos casos de éxito es su aporte de una huella positiva en la sociedad, apostando por situar a las personas en el centro de la estrategia empresarial como elemento diferencial. Las empresas que han ocupado los 8 primeros puestos en la valoración – Admiral seguros, Reale seguros, RTI Real Time Innovations, SIDN Digital Thinking, DHL express, Biofarmacéutica UCB, Sandoz farmacéutica y DKV seguros – han participado en la primera edición de ¿Qué huella quieres dejar en el mundo? con el objeto de compartir iniciativas y visión sobre la búsqueda del equilibrio entre trabajo y vida, poniendo el acento en el cuidado de las personas y del medioambiente, la necesidad de nuevos liderazgos implicados en la salud mental, la felicidad o la diversidad. La imagen siguiente recoge los elementos de motivación que impulsan estas empresas.
Fuente: ¿Qué huella quieres dejar en el mundo?
Great Place to Work, con la colaboración de ifeel, una plataforma para el cuidado del bienestar emocional de los empleados en las llamadas “organizaciones modernas”, ha profundizado en las percepciones y opiniones de aquellas personas que no se sienten bien psicológica y emocionalmente en el trabajo. El Estudio Bienestar en el Trabajo los agrupa y establece consejos y buenas prácticas a partir de la colaboración de compañías calificadas como Best Workplaces – One Beyond, Kairós DS, Liferay, SIDN Digital Thinking, RTI, Sector Alarm-.
Andalucía está presente en estos informes de manera destacada. En el primer puesto de la categoría de 101 a 250 personas empleadas está una empresa granadina SIDN Digital Thinking, una agencia de marketing digital con una trayectoria de más de 20 años y reconocimiento internacional, que ha hecho posible la convivencia de rentabilidad y crecimiento con un ambiente laboral donde las personas desarrollan sus talentos mientras son felices en su trabajo. En el tercer puesto una empresa giennense, Software del Sol, empresa que fue noticia por ser pionera en España en implantar la jornada de 4 días para favorecer la conciliación. Esta imagen, extraída del código de conducta de esta empresa, ilustra los comportamientos empresariales que se identifican como garantía de éxito por las personas trabajadoras.
Fuente: Código de conducta Software de Sol (pdf)
Pero además, la promoción de Málaga como territorio favorable a la implantación de trabajos que promueven entornos favorables al cuidado de la salud de las personas trabajadoras – fomento del nomadismo laboral aprovechando el clima y la creación de empresas de base tecnológica y sus consecuencias en los riesgos psicosociales – también ocupa un lugar destacado, tanto que tiene su propio ranking de mejores empresas para trabajar.
